¡Buenos humos comunidad Cannábica! Es un placer estar de vuelta con un tema muy interesante como lo es la germinación de semillas.
Para germinar semillas de marihuana con éxito, además de adquirir las mejores semillas y los elementos indispensables para lograr un buen cultivo, es recomendable seguir ciertos controles específicos. A continuación, te mostramos trucos infalibles para que tengas éxito en tu plantación.
Existen tres tipos de semillas de marihuana: las hembras, los machos y las hermafroditas, es decir, las que contienen ambos sexos. También tenemos una clasificación de semillas regulares, autoflorecientes y feminizadas, Aunque parece una cuestión obvia, es importante seleccionar bien qué tipo de plantas formarán parte de tu plantación a la hora de comprar tus semillas de marihuana. En este sentido, debes saber que las semillas feminizadas Producen un 99.7%, aproximadamente de plantas hembras y te evitarán controlar el cultivo para buscar plantas machos.
Disponer de las herramientas adecuadas
Antes de iniciar el cultivo del cannabis, es importante reunir todos los elementos imprescindibles para que puedan germinar las semillas de marihuana con éxito son:
Vasos
Agua
Cinta adhesiva y bolígrafo para identificar el tipo de semillas (si optas por cultivar varias)
Pastillas de turba deshidratada o tierra
Maceteros u otros envases donde se dejará crecer la planta
Controlar la germinación de las semillas de marihuana
El proceso empieza cuando la semilla de marihuana se rompe de su cubierta y finaliza cuando llega a convertirse en planta. Dicho esto es importante para un buen desarrollo en la germinación tener control de control de temperatura, oxígenos, nutrientes y agua.
Mimar las semillas para que crezcan mejor
Es importante tratar las semillas de cannabis con delicadeza dado que son un producto sensible. En este sentido, asegúrate que el área de cultivo esté limpia, lávate las manos antes de manipularlas mediante un jabón antibacteriano e incluso utiliza pinzas para evitar contaminarlas.
Aunque estas medidas puedan parecer no necesarias, realmente lo son si lo que pretendemos es que el resultado de nuestra plantación sea de calidad.
Cuida la hidratación de la plantación
Este uno de los ítems más importantes de cualquier cultivo. Las semillas de marihuana necesitan una gran cantidad de agua para germinar correctamente. Es por eso tienen que estar en contacto directo con la humedad durante un día entero hasta que salga la primera raíz. No debes permitir que las semillas se sequen.
De no vigilar la hidratación de las semillas, estas podrían no llegar a germinar nunca.
Temperatura adecuada
Las semillas de marihuana germinan con temperaturas cálidas, pero no se recomienda un exceso de calor. La temperatura ideal es de 24 a 28 grados centígrados.
Germinación en tierra
Se trata de introducir la semilla en una maceta o tierra bajo 2 a 4 cm de profundidad, en un sustrato esponjoso, ligeramente humedecido pero sin pasarse o que esté apelmazado, suelen tardar de 7 a 15 días en brotar. Se aconseja poner la semilla con el pico hacia arriba y la base o donde vés como un agujerito hacia abajo, por ese agujerito saldrá la raiz.
No se debe germinar más de 1 semilla por maceta preferentemente.
Germinar semillas en papel toalla
Pero el más popular y que yo utilizo con mayor frecuencia es germinar en papel de cocina.
Pon varias capas de papel en un plato o un tupper.
Humedece el papel con un pulverizador hasta cubrirlo todo.
¡Importante! Escurre el agua sobrante en caso de haber demasiada, no quieres que se acumule agua en el plato.
Deposita las semillas en el papel, dejando unos cuantos centímetros de separación entre ellas.
Cúbrelas con otras varias capas de papel y vuelve a humedecer.
Transplantar Brotes una vez han Germinado
Si germinaste en papel de cocina o similar. Si activaste las semillas en agua, una vez que radícula se expanda ya es momento de transplantarlas a un medio donde puedan crecer. Todavía son muy delicadas por lo que este transplante no debería ser el definitivo, sino el primero.
Pequeñas macetas o vasos de plástico descartables son una buena opción. No recomiendo que plantes las semillas directamente en el suelo o maceta porque será más difícil mantener las condiciones que necesita para terminar el proceso correctamente. Que el medio sea pequeño te ayudará a poder regular la humedad y temperatura.
Necesitarás conseguir un buen sustrato, aireado y suelto.
Paso a paso
Llena tus macetas o vasos con sustrato.
Importante hacerle agujeros a los vasos en caso de exceso de agua esta drene por debajo.
Humedece el sustrato sin llegar a empaparlo. Utilizar un pulverizador hace las cosas más fáciles.
Haz un agujerito en el sustrato con un lapiz o lapicera. Suficientemente profundo para que la radícula entre por completo, pero que la parte superior quede apenas enterrada.
Para transferir el brote tómalo suavemente e insértalo en el agujerito con la radícula hacia abajo.
Tapa el agujerito suavemente con un poco de sustrato para que pueda salir sin problemas.
Vuelve a humedecer un poco la parte superior del sustrato.
Conclusión
Ahora que ya sabes germinar y transplantar lo siguiente a estudiar es como cuidar tus plantas en sus primeras semanas de vida. Todo lo que tiene que ver con el ambiente de cultivo debes tenerlo preparado antes de comenzar a germinar.
Recuerda compartir tus jardines cannabicos.
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