Cómo y porque debes limpiar tu Grinder

Introducción

Al consumir cannabis con frecuencia, deberas saber lo importante que es mantener tus herramientas limpias y en buen estado. Pero esto no solo se aplica a los bongs y las pipas. También es muy importante limpiar el grinder de forma habitual.

El grinder es una herramienta imprescindible para todo amante de la marihuana. Pero la limpieza de los grinder es algo que a menudo se pasa por alto. Veamos por qué es tan importante limpiarlos y cómo hacerlo.

Te preguntaras ¿Por qué debo limpiar mi Grinder?

Cada vez que usas tu grinder, la resina de la hierba se va acumulando entre sus dientes. Con el paso del tiempo, este material pegajoso no solo afecta a la capacidad de trituración del dispositivo. Un grinder limpio funciona mejor que uno sucio y pegajoso. Si los dientes están cubiertos de resina y mugre, no podrán transformar los cogollos en trozos más pequeños y homogéneos. Y también resultará mucho más difícil usarlo, ya que estará obstruido o bloqueado.

Un Grinder sucio puede ser perjudicial para la salud

Los cogollos de cannabis son materia orgánica, al igual que los alimentos, y la materia orgánica se estropea y se pudre. Con el tiempo, las bacterias y el moho empezarán a crecer en los restos adheridos a tu grinder. Y dado que vas a fumar (o vaporizar) la hierba triturada, no querrás que estas sustancias acaben dentro de tu organismo. Así que una razón importante para mantener tu grinder limpio es eliminar la posibilidad de contraer una enfermedad.

¿Con que frecuencia debo limpiar mío Grinder?

Todo depende de cuánto lo uses. En general, una limpieza a fondo cada uno o dos meses es suficiente, así como una pasada rápida de vez en cuando para evitar que las partículas de hierba atasquen el mecanismo.

Pero los fumadores mas frecuentes que trituran una gran cantidad de hierba todos los días, podrían tener que limpiar su grinder semanalmente para mantenerlo en buenas condiciones.

Partes del Grinder

Los grinders tienen distintas formas y están hechos de diferentes materiales. La mayoría de grinders de calidad disponen de tres cámaras: una para triturar, otra para recoger la hierba, y una última para conservar el kief. Algunos solo tienen dos, les falta el recipiente para el kief, y se comercializan por su sencillez y facilidad de uso.

Los dientes del interior del grinder pueden tener varias formas para poder procesar el material de forma óptima. También hay modelos más complicados (y más caros) que disponen de cámaras y filtros adicionales, nuevas tecnologías, o materiales de alto nivel. Algunos grinders baratos también vienen con un compartimento superior para guardar el cogollo y mantenerlo seguro con una tapa.

¿Que necesitas para limpiar tu Grinder?

• Alcohol isopropílico

• Sal

• Bolsa de plástico con cierre

• Bandeja para recoger el kief

• Cepillo

• Toalla

Este método es ideal para grinders de metal y plástico, y proporciona unos resultados excelentes.

1. Coloca todas las partes del grinder en una bandeja. Lo mejor es usar una bandeja para rolar, pero puedes usar cualquier otra superficie plana.

2. Con un cepillo de dientes y/o palillo, rasca los trozos de suciedad más grandes.

3. Recoge el kief y NO TIRES NADA. A menos que el material que rasques sea viejo, mohoso o huela mal, querrás conservarlo todo para fumarlo más tarde. Esta es también la razón por la que se usa una bandeja, para que no pierdas nada de lo que cae.

4. Después de rascar lo bueno, pon las partes del grinder sobre una toalla.

5. A continuación, utiliza el cepillo de dientes para limpiar todas las partes, prestando especial atención a los filtros de malla. Todas las piezas deberán parecer nuevas.

6. Aclara todo con agua tibia y pon las partes donde puedan secarse completamente.

7. Vuelve a montar el grinder, y ¡listo!

MÉTODO DE LA BOLSA CON ALCOHOL

Otro método de limpieza especialmente bueno para grinders metálicos, es el de la "bolsa con alcohol". He aquí cómo llevarlo a cabo:

1. Consigue una bolsa grande con cierre en la que quepan toda las partes del grinder.

2. Pon dentro todas las piezas, menos los filtros.

3. Vierte 1 o 2 cucharadas de sal en la bolsa.

4. Llena la bolsa con alcohol isopropílico o alcohol de 70 grados para uso externo, de forma que todas las partes del grinder queden cubiertas.

5. Cierra la bolsa. Asegúrate de que esté bien sellada para que no se salga el alcohol.

6. Toma la bolsa y sacúdela durante 30 segundos o un minuto. Hazlo de forma delicada, para que no se rompa ninguna pieza ni se rasgue la bolsa.

7. A continuación, abre la bolsa y saca las partes, ahora relucientes, de tu grinder.

8. Acláralas con agua tibia.

9. Con la ayuda del cepillo de dientes y el alcohol, limpia bien los filtros, acláralos con agua tibia y déjalos secar.

10. Vuelve a montar el grinder, y ¡listo!

Conclusión

Recuerda que el higiene de tus instrumentos de fumar son importantes para una buena salud a la hora de consumir cannabis y también darle durabilidad a los mismos.